Al mirar nuestra vida, nos resulta difícil pensar que nosotras somos miembros de la realeza. Pero la verdad es que Dios es nuestro Rey y que hemos sido elegidas por él.
A medida que tu alma se empape de estas cartas de amor de tu Rey, afírmate en la verdad acerca de:
- quién eres
- por qué estás aquí
- cuánto él te ama