Aquellos que han estudiado por años los diversos avivamientos en todo el mundo concuerdan en que Charles Grandison Finney encabezó uno de los más grandes avivamientos de los Estados Unidos que cambió el curso de la historia.
A él se le atribuye, directa o indirectamente, la conversión de más de 500.000 personas, quienes formaron y protagonizaron un preponderante papel en las bases de esa nación.